Será que últimamente me gusta ser imbécil.Y qué bien se vive eh? Evadiendo responsabilidades, restándole importancia al noventa por ciento de las cosas, riendo y durmiendo, durmiendo y riendo.
Sí, ser imbécil en un periodo corto de tiempo es realmente agradable.
Luego te cansas. Te cansa que nada sea productivo y reconfortante. Te cansas de la rutina del gilipollas, te cansas hasta de ti mismo y te apetece irte a Zimbawe a salvar ballenas... si es que Zimbawe tiene mar y si es que hay ballenas. De todas formas ya sabéis por donde voy, los que lo sabéis. Entonces empieza el rollo, veamos que ocupa el 90 por ciento de mi vida, que debo evadir, que no; que es importante, que no; que es útil, que no. Está bien, te rayas pero mucho. Y luego se te pasa. Se te pasa porque te das cuenta que la vida sigue su curso, se tuerce, se te va la pinza, atraviesan montañas y movidas de metáforas que no me apetece pensar. Es un análisis exhaustivo de lo que te rodea, llegando a la conclusión de que las casualidades que pintan tu existencia son sin duda los átomos de tu día a día.
Sí, ser imbécil en un periodo corto de tiempo es realmente agradable.
Luego te cansas. Te cansa que nada sea productivo y reconfortante. Te cansas de la rutina del gilipollas, te cansas hasta de ti mismo y te apetece irte a Zimbawe a salvar ballenas... si es que Zimbawe tiene mar y si es que hay ballenas. De todas formas ya sabéis por donde voy, los que lo sabéis. Entonces empieza el rollo, veamos que ocupa el 90 por ciento de mi vida, que debo evadir, que no; que es importante, que no; que es útil, que no. Está bien, te rayas pero mucho. Y luego se te pasa. Se te pasa porque te das cuenta que la vida sigue su curso, se tuerce, se te va la pinza, atraviesan montañas y movidas de metáforas que no me apetece pensar. Es un análisis exhaustivo de lo que te rodea, llegando a la conclusión de que las casualidades que pintan tu existencia son sin duda los átomos de tu día a día.
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